Una de las preguntas más frecuentes al momento de firmar o finalizar un contrato de arrendamiento tiene que ver con la responsabilidad sobre el pago de los servicios públicos. Establecer desde el principio quién debe asumir cada obligación es clave para mantener una relación clara entre propietario y arrendatario, y evitar inconvenientes durante el proceso de entrega o recepción del inmueble.
Al iniciar el contrato, el propietario debe entregar el inmueble con todas las facturas de servicios públicos al día, es decir, sin deudas pendientes. Esto garantiza que el nuevo arrendatario reciba el inmueble en condiciones adecuadas y sin cargas anteriores a su ocupación.
A partir del momento en que inicia el contrato, el arrendatario asume los pagos de los servicios públicos correspondientes a los consumos generados durante su permanencia en la propiedad. Es importante que, al recibir la primera factura, revise el periodo de facturación. Si se evidencian consumos que corresponden a fechas previas al inicio del contrato, se deberá hacer una liquidación proporcional para que cada parte pague únicamente lo que le corresponde.
Al finalizar el contrato, en ciudades como Medellín, las empresas prestadoras de servicios públicos emiten sus facturas con corte vencido, es decir, después de haberse generado el consumo. Por esta razón, aunque el arrendatario entregue el inmueble, quedarán por facturar los consumos correspondientes a los últimos días de ocupación. Es obligación del arrendatario cubrir esos valores pendientes, ya que corresponden al periodo en que aún habitaba el inmueble.
En Inmobiliaria La Estrella, promovemos acuerdos justos y transparentes entre propietarios y arrendatarios.
